sábado, noviembre 03, 2012

Una Gran tela


Cuando el amor se aleja sientes un agujero en el pecho, lo interpretas como vacío y es que algo se arranca de nuestra alma, como si aquel o aquella que ocupo ese lugar al marcharse, se llevara consigo un trozo de ella, como si fuera una gran tela, descubres que estas lleno de trozos que has traído contigo o figuritas de trozos añadidos en el vacío, como una bandera sin país, remendada hasta el cansancio...
Cuando la nostalgia se hace presente, cada costura duele un poco, recordándote que esta echo de carne, hueso, piel, sueños y millones de momentos que se agitan a cada paso, al transcurrir los días te acostumbras a tener un mapa en tu corazón, que cargas a veces ya sin darte cuenta y sigues sin pensar demasiado , evitas recordar y mirar en tu interior, pero cada vez que te relacionas con un nuevo amor, ese corazón al cual no quieres mirar, comienza a tirar y apretar las costuras recordándote tu historia.
Pero sigues, porque la dulzura de sentirse amado puede más y la reina locura permite que  volvamos a mirarnos a los ojos con otro ser humano, mostrándonos el alma y cuando se unen dos banderas soportando sus costuras, contra viento y marea, se convierte en un solo lienzo, que puede continuar unido a pesar de su desaliñada imagen de país remendado, pero si tan solo uno No comparte las profundidades de sus aguas y navega en la superficie, el lienzo se raja, sin crear ríos, países, continentes y universos, dejando ese hueco que interpretamos como vacío...

jueves, diciembre 15, 2011

Corazón

No sabe distinguir el corazón la dicha del dolor, es una bomba de tiempo apretada en el pecho, nos da vida para luego quitarla,
herramienta tan útil como macabra, se enferma y nos enferma de tangibles e intangibles, nos regala suspiros de su cielo rojo, de su mar sediento, nos quita con el llanto, nos seca en la oscuridad.
Corazón que late rápido en el pecho, cuando la lengua se niega a decir palabra, cuando los ojos se salen de tanta belleza.
Corazón que late fuerte cuando nos deja la fuerza,
entregado a su suerte en una especie de abandono. Corazón ahí de mí, que puedo hacer para darte Lo que buscas…solo en mi sueño tibio encuentro tu paz.

jueves, marzo 03, 2011

Sonreír Gitanamente.

Cuidado estoy armada de impresionantes aparadores, contienen una muestra confusa de la realidad, No se confunda, Son solo momentos mágicos, testarudos, eternos, pequeños, imperceptibles. El pasaje no cuesta un chelín, pero el trayecto es curioso por decirlo menos, como un museo de cera, todo se queda detenido eternamente, para ser observado incontables veces, examinado con curiosidad, hasta pasar al siguiente deseo, Incontenible. Una montaña rusa en donde se siente caer, sin embargo el cinturón te resguarda, las manos te resguardan, la fuerza que viene de tus yemas la contiene, mi corazón la contiene, es un mostrario de la diversidad del alma, entre resplandecientes destellos, donde es imposible apartar la necesidad que abruma. Y corre deseosa por las venas, cuando las montañas crecen en los ombligos calurosos, arrancando el sudor de las caderas que se agitan, en el repentino impulso de girar, cuando comienzan a flotar los dedos de los pies, haciendo agitar el corazón, distendiéndose incomprensibles, señalando los puntos precisos, cayendo sobre mí el grito infernal de la alarma de intrusos. Es necesario bajar la luz, correr al mostrador y sonreír gitanamente.

Que me lleve al mar…

Dentro de mí el agitar, suena dos veces y tres, es la realidad confusa la que llama, llueve sobre mi cabeza, ese hilo delgado, mientras expongo el rostro a la caricia húmeda, mis piernas se reincorporan con la espuma, mis dedos se deslizan por el cabello, suspiro, tomo aire…no quiero salir, deseo quedarme en este pequeño rio que me lleve al mar… me arrugo, reconozco La necesidad de caminar, llegar, empezar de una vez, seco mi piel, la cubro de ropas, unas pinceladas en el rostro, tomo el bolso, chequeo las llaves y salgo. Calor, desde el cemento, calor desde el cielo. en el aire… La gente pasa corre, se detiene… Las nubes no se dejan ver, la bandera flamea recordándome el lugar. Puedo pestañar para desaparecer…

Olas de este mar ficticio.

Llueve sobre mí La delicada luz del amanecer Despejando cada duda por un instante impreciso En ese pestañar que se multiplica eternamente Entre el subir y bajar las cortinas del alma Saboreo el suave calor en mi piel Rodando entre las sabanas.

martes, diciembre 14, 2010

La estrecha calle

Te desdibujaste frente a mí Cuando la pupila retornaba a su sitio Te desdibujaste frente a mí En el humo de la miseria cobarde En el aliento de la muerte que emana de tus poros La estrecha calle que nos separa La sangre que nos recorre Te desdibujaste en el recuerdo En la sonrisa apretada, en la lágrima Contenida. La estrecha calle que nos separa Usurpador de emociones Cuerpo sin medula Te desdibujaste frente a mí Y ya no queda nada. La estrecha calle que nos separa La angustia que la tiñe Las huellas marcadas de dolor No existe retorno Todo lo pasado es punto muerto. No existe retorno.

miércoles, noviembre 03, 2010

Des-Dobles

Pliegues extraños y confusos
en dondeEl tiempo no acompaña las fugas y nos hacemos mierda de tanto gritar Como lobos hambrientos Que corren y corren en la búsqueda que encuentra siempre más en su paso

Sonrisa

Energías del centro Emanan destellos Transforman la piel Se desarman se escabullen Y vuelven a mi Para transformar el sonido Doblar la lengua Pasearse en los labios Jugar con las pestañas Hacer una mueca Sonreír.

Imagina

Viajar hasta que los huesos se sequen Hasta que llueva en mi mente Hasta que los ojos se derramen por el rostro Hasta que el rostro parezca un paisaje Sin países En donde valga más la sonrisa En donde la mano que se da no quita el codo En donde los dedos se plantan Y crecen las uñas En sueños prohibidos De rasguños y alaridos De caricias intensas De besos sin forma En cuerpos sin piel En piel sin huesos Imagínate La tierra escupiendo gente Que se mescle y no se entienda Que el final es el eterno Que el principio no existe Que no hay nada Porque es demasiado todo Que solo estamos Que somos Que podemos.

viernes, octubre 15, 2010

Traficante de emociones perdidas

Venas, huesos y piel,
es la imagen aturdida frente al espejo
La retina se desdibuja en el inverso, sin contención.
Impulsos eléctricos que aturden a la lengua cansada
El pestañar que intenta borrar la imagen que te convirtió en descartable
Objeto con forma, color y aroma
Deleita, Suda, Aturde, Enloquece.
Souvenir de vitrina, Traficante de emociones perdidas, contenidas.
La pasión que entorpece la razón
La mentira para apaciguar el anhelo
Siempre lo supiste
Blanca nieves no comió la manzana del pecado.
La bella durmiente estaba drogada de espera.
Ricitos de oro fue violada por los osos,
Sacaron su cabello y tapizaron sus ojos.
La sopa segura sobre la mesa.
La mosca vuela hasta ser muerta por ajenos o por sí misma.
Romeo y Julieta fueron envenenados por su propio sentimiento.
La locura te hace olvidar.
Vuelves a desplazarte
Tomar aviones
Descorchar vinos
Bailar en las sábanas
Reír con los inmortales
Reírte de ellos
Escupirles en el rostro tu fragilidad
Fumar
Mientras distingues el eco de tu voz
Mientras tu voz se apaga
La imagen se pierde
No existe inverso
El reflejo ha decidido esfumarse.

lunes, septiembre 13, 2010

Des-bordado en las Orillas

Cuando la lengua se atrapa en los labios y las venas revientan en el ojo. la sangre resbala por el pensamiento,provocando el fulgor . Una gota de vacio revienta en la sien creando más espacio. ¿Cómo detener al loco apasionado que en sus yemas carga la pistola de la sin razón? entre sus piernas desliza la rabia, contoneo de la angustia que destella en las cuerdas del infinito. Y tu cuerpo que se mueve, masturba ideas de píldoras y alcohol, humo que desdibuja la realidad ficticia. Dame la intensidad para no caer en la búsqueda irrisoria de aquello que tenemos en el ombligo. Si te mueves más despacio gritare de emoción, es que mi membrana tiembla cuando te veo traspasar el sonido y la luz . No me pidas que me detenga quiero seguir,quiero seguir. Tan pronto deje el último aliento,podrás sepultarme en mi viaje salvaje al corazón. Seré el último aleteo que sientes en tus rodillas